PP, ex giles y no adscritos rechazan un préstamo vital para Estepona

PP, ex giles y no adscritos rechazan un préstamo vital para Estepona

Con su desaprobación no cobrarán los proveedores locales


Málaga101. La oposición en el Ayuntamiento de Estepona no perdona ni el pago a empresas locales. Ni siquiera aunque sus decisiones signifiquen que el consistorio no podrá pagar las deudas a sus proveedores. El préstamo estaba orientado a normalizar parte de la grave situación económica del Ayuntamiento y especialmente a pagar a empresas locales a las que se les debe “mucho y desde hace tiempo”. El Consistorio iba a acogerse al Decreto Ley de medidas urgentes del Gobierno central para el saneamiento de deudas a empresas y autónomos. No pudo ser. PP, ex giles y no adscritos hicieron piña y votaron en contra

Argumentando que el plan de saneamiento no es real. Según el portavoz popular, Ignacio Mena el plan de amortización recoge es imposible de cumplir. El concejal no adscrito, Francisco Zamorano, alegó que el crédito era pagar a las entidades supramunicipales y que la solución es reducir la plantilla hasta incluso 500 trabajadores.

Valadez: Cierre de empresas
El alcalde, David Valadez, ha lamentado que con esta decisión, con esta mayoría de minorías de bloqueo, “sigan cerrando empresas locales porque el ayuntamiento no les paga lo que les debe”. Justificó la solvencia de la operación en la garantía que significaba contar con todos los informes favorables de la intervención municipal.
También el alcalde socialista tildó como de “extraordinaria irresponsabilidad” la negativa del PP que vuelve a demostrar lo poco que le importan los intereses de los empresarios” que no cobrarán por intereses electorales.

Propuesta aprobada de préstamo extraordinario
Como solución sólo quedaría un préstamo extraordinario que siga el modelo del aplicado en Marbella. Una moción del PP en ese sentido fue aprobada por unanimidad de todos los miembros del Consistorio esteponero. En la moción se pide a la Junta de Andalucía financiar un préstamo de 38 millones de euros y con una amortización contemplada a 20 años.