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Sunday, July 05, 2009

Guía de las corruptelas de Estepona

Guía de las corruptelas de Estepona

El amiguismo y las vías rápidas vivían instalados en el Ayuntamiento

El País. El sumario del caso Astapa contra la corrupción en el Ayuntamiento de Estepona (Málaga) describe toda una serie de prácticas que demuestran hasta qué punto se había instalado el amiguismo y la vía rápida en el funcionamiento del Consistorio esteponero. Desde las contrataciones a dedo al mal uso de los servicios públicos, como la grúa municipal, pasando por insistentes peticiones de dinero a diferentes empresarios con intereses urbanísticos para que subvencionaran actos.
El ritmo de gasto del equipo del ex alcalde Antonio Barrientos, muy por encima de las posibilidades de ingreso, terminó por "agotar todas las fuentes" y dejar al Consistorio en una situación calamitosa. Un año después tienen una deuda de 164 millones y pasan apuros para pagar las nóminas de sus 1.300 empleados. En algunas de las prácticas recogidas en el sumario.

- Contrataciones. En sus conversaciones telefónicas el ex alcalde Barrientos, que pasó seis meses en prisión preventiva, da instrucciones para que contraten a diversas personas que mandaba de forma personal y a los que ha marcado el currículo con un asterisco.

Antes de las últimas elecciones municipales, el 6 de abril de 2007, el regidor habló con Juan Carlos Gurrea, consejero delegado de una sociedad municipal, sobre otros 30 contratos para un asunto relacionado con las playas. Siempre con las elecciones en mente, ediles como Marisa Rodríguez Pino, encargada del área de Playas y bajo fianza de 50.000 euros, presiona para lograr su plaza. "Pide a Antonio que firme lo antes posible las bases para que se publiquen mediante urgencia", explican los investigadores. La edil dice que todo "debe estar solucionado antes de las elecciones, porque si ella sale de concejal, luego a ver cómo se presenta a su plaza", algo en lo que los agentes ven "claros signos de que la adjudicación no sigue los cauces reglamentarios".

Los enchufes también se utilizan para controlar la asamblea local del Partido Socialista. El jefe de gabinete de alcaldía José Flores, otro de los máximos imputados, habla de impulsar contrataciones, en las que también colaboró el edil socialista Francisco Zamorano, encargado por entonces del área de Hacienda. "Si Paco resuelve la plaza al hijo de Farruco y metemos a la hija, lo tenemos seguro. Con eso tenemos la asamblea controlada", calcula Flores. El jefe de gabinete también pidió a otro imputado que se asegurara de que cinco o seis personas a las que ha tomado el nombre para contratarlas "vayan a las asambleas, por lo menos a las gordas".

El Partido de Estepona (antiguos gilistas) también utiliza estas fórmulas para que sus afiliados no pierdan capacidad adquisitiva. Manuel Reina, edil del PES también imputado y antiguo socio de gobierno de Barrientos, intercede en la contratación de la mujer de Alfonso Servia, antiguo gerente de Servicios. "Acostumbrado al nivel de vida que llevaba, si deja de ser concejal necesitará que trabaje su mujer", dicen los investigadores.

Las conversaciones también sacan a la luz toda una serie de triquiñuelas para que las contrataciones pasen desapercibidas. Flores habla de colocar a un pintor, al que llaman El Coleta, "de jardinero, en playas" para que no lo detecten, o recurrir a un periódico local para que meta a una relaciones públicas seis meses a cambio de "buscarle un dinerillo en publicidad".

- Ingeniería presupuestaria. Flores se vanagloriaba de llevar medio Ayuntamiento para adelante él solo (sobre todo Hacienda y Urbanismo) y se autodenominaba "el señor de los hilillos". La policía considera "reveladoras" las conversaciones en las que el jefe de gabinete comenta que no hay dinero para pagar las nóminas ni los proveedores. Curiosamente es el mismo Flores quien propone ponerse un complemento en el sueldo de 1.800 euros de forma que "se pondría ganando en bruto más que el alcalde".

Tras las elecciones y antes de ocuparse de Hacienda, Zamorano aconsejó a su antecesor Manuel Reina, del PES, que "se equivocara" en 150.000 euros en las nóminas para satisfacer ciertos pagos. "Así la cantidad que tendrían que solicitar al Patronato para las nóminas sería de un valor más elevado del real", explican los agentes.

- Exprimir empresarios. La delegación de Urbanismo aparece reflejada como una máquina de generar dinero que no siempre se controla por los cauces habituales. El jefe de gabinete pide a sus responsables que "generen dinero" y precisa que el dinero de las licencias de obras es para gastos corrientes, para que se hagan eventos o conciertos". "50.000 euros de patrocinador se le pueden sacar a cualquiera", comenta Flores en relación con una petición de ese dinero para eventos deportivos. Las llamadas a Urbanismo o empresarios para preguntar si pueden "colaborar con algo" también se suceden.

- Taller y grúa gratis. . En una conversación en la que Flores habla de rescindir el servicio de grúa, conoce que el empresario que lo gestiona tiene un listado de nombres de personas privadas, concejales y funcionarios que no pagan nada si la grúa les retira el coche y que otros empleados, entre los que nombra al secretario y a la coordinadora de Urbanismo, Patricia Rojo, hija del presidente del Senado, llevan su coche al taller o a lavarlo sin pagar.

La vida del Consistorio esteponero a través del teléfono
MARISA RODRÍGUEZ-PINO

Ex concejal de Playas

- La edil, en libertad con 50.000 euros de fianza, urge al alcalde a que publique las bases de su plaza en el Consistorio antes de las elecciones.

JOSÉ FLORES

Ex jefe de gabinete

- Se autodenomina "el señor de los hilillos". Presume de haber llevado "medio Ayuntamiento" y aportar de Urbanismo dinero para las nóminas y gastos corrientes.

FRANCISCO ZAMORANO

Ex edil de Hacienda

- Aconseja a su antecesor, el edil posgilista Manuel Reina, también implicado, "que se equivoque" en 150.000 euros en las nóminas para dejar las cuentas cerradas.

ANTONIO BARRIENTOS

Ex alcalde de Estepona

- En varias conversaciones telefónicas, el 18 de abril de 2007, el ex alcalde socialista, que pasó seis meses en prisión preventiva por el caso Astapa, pide a sus interlocutores que "contraten a diversas personas que él envía de forma personal" marcando los currículos de algunos de ellos con un asterisco para que los reconozcan.