Montesinos
Artículo de opinión de Rafael Rosselló publicado el lunes 14 de abril de 2008 en Diario Sol
Montesinos
Pero además, absolutamente: Rafael Montesinos ha demostrado, tras las declaraciones al programa "Vaya bacalao", que es un señor de los pies a la cabeza. A ver si hay suerte y aprenden de él el resto de nuestros políticos.
Cuando una persona, por su cargo o por sus actos, se convierte en un personaje público, está expuesto a las críticas, obviamente con unos límites que están en su derecho a la intimida, y el arte, el señorío, se demuestra sabiendo encajar esas sátiras o comentarios sobre su actividad "pública" o lo que pueda afectar a las personas que, por su cargo, dependen de él.
Yo, soy un comentarista, un caricaturista, de lo cotidiano y no puedo negar que los políticos son mis personajes ya que a mí con quién se acuesta Jesulín o si paga o no Paquirrín en las casas de chicas de moral despistada, como diría mi abuela Leonor, me toca el pié. También debo confesar que Montesinos me ha inspirado en infinidad de ocasiones y que, quizá, él ha acaparado, con absoluta preferencia, mis artículos.Por todo ello he de reconocer que sus declaraciones a "Vaya bacalao", en las no se ha negado a venir a "Sopa de caracol" y que se ha comprometido que, en cuanto tenga la agenda menos cargada, acudirá me han causado una grata sorpresa y en estos momentos, que quede constancia, le estoy haciendo "la ola" porque es todo un caballero.
Una vez aclarado todo esto, empecemos. Agripina, lo tienes crudo por dos motivos, el primero, porque me veo, ahora, obligado a insistir en la asistencia a mi programa de Montesinos y tú, lo siento, pero quedas relegada. El segundo, que habiéndote ofrecido un libro tan interesante como "Andalucía indómita" que no te hayas dignado aceptarlo, es una afrenta sin precedentes: no hacia mí sino hacia los editores de libros, hacia los bichos que hay en el campo, hacia los árboles y demás plantas y, sobre todo, hacia los indómitos andaluces, que hay muchos y no te van a volver a votar ni de coña.
Y hablando de "indómitos", vaya tela el debate de esta semana del señor Lino. Como sigamos así los jueces de Estepona no van a dar a basto. Parece ser que han decidido, unos y otros, que en vez de debatir los "acuerdos" en los "Plenos", los van a discutir ante el juez de guardia. Sinceramente, el espectáculo no puede ser más lamentable y bochornoso. Las acusaciones de corrupción, que se vierten los unos contra los otros a diario, empiezan a hacer sospechar a los ciudadanos que aquí, en Estepona, hasta el más tonto hace relojes y encima funcionan. Y he aquí el porqué de mi insistencia de que cuando se pierden unas elecciones es obligatorio dimitir y renovar las caras. Si en la oposición están los mismos de siempre, que encima han tenido responsabilidad de gobierno, su labor, como oposición, siempre estará frenada por acusaciones hacia su pasado y esa fiscalización, tan necesaria para el buen desarrollo de la vida municipal, estará, o podrá estar, amordazada por eso de "el que esté libre de culpa, que tire la primera piedra". En definitiva, lo mejor es renovarse: ya saben ustedes, "renovarse o morir". Además, es aburridísimo ver siempre las mismas caras: todo pasa de moda, hasta los políticos. Y como dijo Montesinos, en sus declaraciones a "Vaya bacalao", al que no le guste, lo que digo, que se joda.
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