DUELO DE MACHitos

Editorial Estepona Información. Sábado 22 de marzo de 2008

DUELO DE MACHitos

quién iba a decir que cuando Antonio Barrientos convocó una sesión plenaria, para el pasado día 13, se iba a seguir hablando de ella pasadas dos semanas. El caso es que ha ocurrido y que el pleno, o especialmente el receso entre plenos, está dando más cuerda que los asuntos que se trataron. A estas alturas ya todo el mundo conocerá el incidente, el SMS al teléfono del portavoz socialista y sus consecuencias televisivas posteriores. Y parecía que ahí iba a quedar la cosa, pero no, incluso Franco ha salido a relucir cuando Francisco Zamorano ha señalado que si el ex-dictador no le hizo callar no lo hará Crespo con sus denuncias. Pero eso haya sido quizá lo anecdótico, lo graciosillo, si es que tiene algo de gracioso, del asunto. El portavoz del PES ha puesto una denuncia contra Zamorano y además, ha ampliado la querella que presentó en la campaña de las municipales contra Antonio Barrientos, y aquí es donde se ha liado. Cronológicamente hablando, el lunes, en Estival Televisión, hablaba el alcalde, Antonio Barrientos, y hacía unas alusiones muy directas a su otrora socio de gobierno, José Ignacio Crespo, sobre sus aspiraciones de ser alcalde a la sombra en la etapa de gobierno anterior y de las tropelías que éste le hacía, desde convenios que no eran visados por la Alcaldía a obras para las que no se contaba con consignación presupuestaria y un largo etcétera que, como era de esperar, tuvo su réplica correspondiente. Y llegó el momento de Crespo, también en Estival Televisión, y además de dejar una perla en el aire, al confesar que el presume de no haberle levantado nunca la mano a una mujer y que seguramente no todo el mundo puede decir lo mismo, incidía en los mismos calificativos, con mayor lujo de detalles, que había utilizado Barrientos pero, evidentemente, al contrario. Valentía y cobardía, siempre aderezadas del complemento ‘política’, se usaban uno y otro día, una situación similar a la de un ‘duelo de machitos’ que poco o nada favorece en la consideración ciudadana de la clase política y, mucho menos, enriquece el debate que siempre debe despertar cualquier acción de gobierno entre las dos partes claramente encontradas, gobierno y oposición. No es esta, en ningún caso, la manera en la que se deben manejar nuestros políticos, máxime si se trata del alcalde y del líder de la oposición. No es justificable que Barrientos recurra al argumento del desconocimiento, que muy poco dice a su favor, ni que Crespo se enroque en su condición humana. No es aceptable que se utilicen métodos casi subliminales para acusar de cosas innombrables al adversario. No es admisible que tengamos a dos máximos exponentes de las dos circunstancias políticas municipales jugando, de plató en plató a ver quien es capaz de decir la incongruencia más elevada.Los vecinos, asisten atónitos a este momento en el que, por ahora, nadie ha dado marcha atrás ni, menos aún, ha pedido disculpas por su actuación o sus declaraciones. Quizá si alguno lo hiciese ganaría mucho, respeto sobre todo, ante los ciudadanos a los que representan. Pero lo que es más grave, ante este espectáculo, y en esto se parecen a los matrimonios con divorcios conflictivos, es que ahora, cuando ya no están juntos y no comparten lecho político, están sacando las bilis tragadas durante cuatro años.