«El problema tiene difícil solución a corto plazo»

«El problema tiene difícil solución a corto plazo»

La Voz Digital. «La mayoría de ayuntamientos atraviesan actualmente por una situación compleja». Francisco Villalba, presidente de Analistas Económicos de Andalucía, comienza señalando que, aunque no conoce en profundidad su realidad económica, el de Jerez «no es un problema exclusivo». Advierte que, en mayor o menor medida, casi todos están pasando por malos momentos por culpa de la crisis.
Eso sí, apunta que parece que en el caso del jerezano, «lo suyo viene de mucho antes». Y que, como otros muchos, «posiblemente haya estado demasiado tiempo con unos ingresos inferiores a los gastos que realizaba». Añade que también se había generalizado entre lo consistorios andaluces el hábito de «asumir competencias que no le correspondían para darle un mejor servicio al ciudadano». Y que todo eso ha ido generando, principalmente, que la situación financiera «fuese empeorando».
Afirma que 700 millones de euros de duda y una plantilla de 2.700 trabajadores «es demasiado» para un Consistorio como el de Jerez. «Está claro que hay cosas que no se han hecho bien». Pone un ejemplo concreto: el Plan E (ayudas del Gobierno a los ayuntamientos para el fomento de empleo a través de obras). «Todo ese dinero se tendría que haber destinado a mejorar la situación financiera de los consistorios; de esa forma se hubiese consolidado más empleo», dice.
A pesar de la lejanía y de manejar únicamente los datos publicados en la prensa, considera que «la situación del Ayuntamiento de Jerez «es difícil» y que «tiene difícil solución a corto plazo», que en cualquier caso insiste en que pasaría por «ajustar los capítulos de ingresos y gastos».

El ejemplo de Estepona
Explica que el de Estepona atraviesa por una situación «que podría considerarse parecida a la de Jerez». Y que las soluciones, por tanto, deben ser igualmente similares, pasando por «una reestructuración profunda y unos planes de saneamiento».
No quiere entrar a valorar que la alcaldesa haya reconocido que no puede garantizar el pago de las nóminas de los trabajos municipales, aunque sí señala que es «un claro síntoma» de que la situación económica no es buena.
El analista económico tampoco considera posible que una administración superior (Gobierno central) acabe interviniendo para auxiliar al Ayuntamiento: «Éste tiene una autonomía y revocarla es complicado. Además, el Estado no es que tenga precisamente una situación tan buena como para ir ayudando a los consistorios con problemas».