estepona

Thursday, September 24, 2009

De Katowice a Málaga


De Katowice a Málaga

SUR. Conseguir la medalla de oro en una competición en la que todo se puso en contra es muy satisfactorio, pero más si se comparte la difícil conquista con la ciudad donde se ha nacido y donde siempre se ha sentido el cariño de la afición. El Ayuntamiento de Málaga acogió ayer con los brazos abiertos al jugador malagueño Carlos Cabezas y al seleccionador nacional, Sergio Scariolo, en un acto que sirvió para dedicarles un homenaje y entregarles una placa conmemorativa por la histórica gesta conseguida. Por supuesto, ambos agradecieron al Consistorio y a toda la ciudad su constante apoyo. Al homenaje no pudo asistir el fisioterapeuta Fernando Lacomba, que formó parte de la selección de baloncesto, pero que viajar con el Málaga para el partid que jugó ayer contra el Espanyol en Barcelona.
«Para mí es un orgullo compartir esta medalla con toda Málaga», afirmó Cabezas, orgulloso con su galardón en un Salón de los Espejos repleto de periodistas. Y es que el ex jugador del Unicaja no se olvidó en ningún momento de su antigua afición en Polonia. «Siempre la he llevado conmigo», dijo, y añadió: «Me acordé en todo momento de mis amigos, de mi familia y de los aficionados». Scariolo repitió las palabras del jugador, ya que para él Málaga es la ciudad que lo «adoptó» y lo «acogió» durante sus años de entrenador del Unicaja.
Ahora parece que fue fácil ganar ese oro conquistado en la final celebrada en la ciudad polaca de Katowice, pero los jugadores sufrieron (y mucho) para salir de la mala racha con la que se empezó el Europeo. «Tuvimos la fortuna de reaccionar a tiempo», destacó Cabezas. Sin duda, habría sido una decepción para todos los amantes de este deporte si la selección se hubiera vuelto de Polonia con las manos vacías.
Sin embargo, fue ese mal inicio lo que le hace saborear más el oro. «Estuvimos muy preocupados después de jugar contra Gran Bretaña y Turquía, pero luego fuimos de menos a más y eso es muy satisfactorio», destacó el malagueño. Cabezas afirmó que si no hubiese sido por «las buenas alternancias que hizo Scariolo», no habría sido posible ganar el Europeo.
«La unión que tiene el equipo y la sinceridad con la que se desarrollaron las cosas ayudaron bastante para cambiar la rutina», reiteró Scariolo, que acudió al Ayuntamiento apoyado en una muleta, ya que fue operado el martes por una lesión en el menisco derecho. Según Cabezas, los malos resultados hicieron a la selección temerse lo peor, pero a la postre le ayudaron, ya que le permitieron quitarse la presión y «cambiar de mentalidad».
Irremplazables
Lo que sí echaron en falta los campeones del Europeo fue a dos compañeros de la casa: Carlos Jiménez y Berni Rodríguez. «Los recordamos en todo momento, porque son jugadores claves, su experiencia y su coherencia nos habría venido muy bien», recalcó el seleccionador nacional. Hay que recordar que Berni no pudo asistir a Polonia por lesión y que Jiménez decidió no ir por cuestiones personales. «Yo hablé con Jiménez antes de ser seleccionador y me explicó por qué no iba a ir al campeonato este año», explicó Scariolo. El italiano afirmó que las razones que le expuso estaban «más que justificadas» y eran «totalmente respetuosas».
Al final, Cabezas confesó que echará de menos Málaga. «No será lo mismo estar aquí que en Rusia», explicó el base malagueño, y añadió: «Aun así todavía puedo aprovechar el tiempo que pasaré aquí, porque tengo que hacer la pretemporada con el Khimki en Estepona».