Guerra Sucia

Artículo de opinión de Gerardo Galán, Convocatoria Los Verdes

Guerra Sucia

Los sectores del PSOE, enfrentados desde antiguo y radicalmente separados a raíz de la operación Astapa, parecen enfrascados en una auténtica guerra sucia de descalificaciones y filtraciones de supuestos trapos sucios que hacen muy poco bien a la ciudadanía de Estepona.

No por la revelación de asuntos relativos a los políticos locales, que nunca está de más que los ciudadanos sepamos de qué pasta están hechos los que nos gobiernan, sino porque las filtraciones malintencionadas pueden dar lugar a injusticias y porque en alguna ocasión se ha derivado al ataque personal y al ámbito de lo privado con una evidente mala fe. Ya saben, el principio de calumnia que algo queda es un arma reiteradamente usada pero absolutamente reprobable.

La revelación de “datos” bastante incompletos y con una interpretación muy sesgada relativos al “campito” del Jefe de Gabinete de Alcaldía es un disparo indirectamente dirigido a David Valadez aunque efectuado en la frente de Luciano Sánchez. Quizá por cobardía o por falta de argumentos para intentar mancillar al propio Alcalde.

No es nueva esa fea práctica, y me atrevería a decir que es repetida por los que tienen mucho que callar ante la ciudadanía hasta que no se expliquen debidamente en los tribunales de justicia. La lectura de esa “noticia” en el periódico del Sr. García García me ha recordado a la campaña de 2007, en la que se intentó perjudicar candidatura de Los Verdes mediante la “revelación” del expediente privado de uno de mis compañeros de candidatura, quizá también intentando manchar al cabeza de lista, como ahora se hace con Valadez.

En aquella ocasión lo tuvimos muy claro, el custodio de la documentación, Antonio Barrientos, era el responsable por acción u omisión de la llegada malintencionada a la prensa de datos incompletos y falsedades con la intención de perjudicar. En esta ocasión también lo tengo muy claro. Un antiguo “amigo” y ahora excompañero de partido de Sánchez y Valadez conocido por su rastrera presencia en la política local es perfectamente capaz de alimentar la guerra sucia.