estepona

Saturday, January 26, 2008

AVANCES DE LA CIENCIA

Artículo de opinión de José Gerez.

AVANCES DE LA CIENCIA

Lo lamento pero no pienso escribir sobre la inseguridad ciudadana. Entre otras razones porque tendría que ocuparme de brear al responsable en lugar de, cómo hacen mis colegas, dirigir sus iras contra el Concejal de Tráfico que no de Seguridad Ciudadana, porque esta competencia no le ha sido delegada. Y yo, en uso de mi legítimo derecho a la libertad de expresión, me niego a hablar otra vez del ínclito. Lo lamento, máxime ahora que hemos descubierto su lado humano gracias a Rafael Roselló y, sobre todo, su dependencia de su amigo invisible, ese que tienen los niños en las películas americanas de serie B y que, en el caso del ínclito, parece que se llama Toni y está presente en todas las decisiones importantes de su vida.

A mi lo que de verdad me ha puesto las pilas esta semana ha sido darme cuenta de lo que nos queda por avanzar. Dirán ustedes que el siglo XX fue prolífico en avances de la ciencia y es cierto. Fleming resolvió el problema de las infecciones con la penicilina y alargó la esperanza de vida de los ciudadanos, Einstein demostró la teoría de la relatividad, capital para posteriores avances matemáticos y físicos y su aplicación en distintos campos de la ciencia. Dicen, aunque yo no lo tengo tan claro, que los americanos pisaron la luna, se inventó el teléfono, la bombilla, el radar, la lavadora, el bolígrafo, el microondas, el satélite artificial, el ordenador, el bolígrafo, la fregona, el chupa-chups y, entre otros muchos otros, el corazón artificial. En materia de construcción hemos visto asombrados como se levantó el Empire State, las torres Petronas, el Golden Gate, como se ha perforado un túnel en el Canal de la Mancha por donde circulan trenes de alta velocidad y vehículos, como se está creando una nueva ciudad y cientos de urbanizaciones en islas artificiales en Dubai y, en el colmo de los avances, asistimos a la creación de una pista de patinaje urbana en plena Costa del Sol, en el centro de nuestra ciudad, en plena calle Terraza. Pero, como les decía, nos queda mucho por avanzar.

Que Estepona es especial lo sabemos todos. Por muchas y buenas razones además. En el aspecto que nos ocupa, en este caso negativo, lo somos porque la ingeniería mundial ha sido incapaz, según manifiesta al menos nuestro Concejal de Infraestructuras, Sr. Duarte, de dar con la fórmula que permita colocar adoquines sobre un arroyo embovedado sin que cada vez que pasamos con el coche en lugar de oír el CD de la Pantoja, escuchemos el piano de Richard Clayderman. Dado que, en principio, no me creo que el Sr. Concejal haya querido mentirnos, debo concluir que el señor Duarte o no se fija o desaprovecha sus viajes de placer para hacer algo más que tostarse al sol. De haber sido así y dado que pasó sus vacaciones de Navidad en México, podía haber visitado las ruinas de la civilización Maya y en Chichén Itzá hubiera encontrado la solución a sus problemas. Allí se encuentra la pirámide de Kukulkán, también llamada el Castillo, construida sobre un pozo natural, el Cenote Sagrado, sobre paredes verticales de una profundidad de más de veinte metros. Allí, Sr. Duarte, desde el año 534 antes de Jesucristo, sobrevive en pié, sobre una superficie arenosa, una de las muchas maravillas del mundo que fueron creadas por la mano del hombre antes de la invención de todos los materiales y útiles que ha empleado la constructora contratada en época del Sr. Montesinos para hacer esta magnífica chapuza.

El señor Duarte, esto ya va en serio, ha mentido de forma flagrante para proteger a su socio y, de rebote, al máximo responsable. A un Concejal no pueden exigírsele conocimientos ajenos a su profesión pero sí, al menos, acierto en la elección de colaboradores técnicos. En el caso que nos ocupa, ni lo uno ni lo otro. Y van a manejar 200 millones de Euros de presupuesto teórico. Dios nos pille confesados.