Canteras ilegales ponen en peligro las reservas de agua

Estepona Información. Sábado 6 de octubre de 2007

Canteras ilegales ponen en peligro las reservas de agua

Desde hace dos años extraen y almacenan piedra sin tener, al parecer, licencia

paula marín/eSTEPONA

La comunidad de regantes de la Boladilla ha dado la voz de alerta. Sus tierras están en peligro y con ellas, la mayor reserva de agua dulce del municipio.

Desde hace dos años, los márgenes del río Guadalmansa se han convertido en una verdadera zona industrial y eso a pesar de estar calificados como suelo rústico protegido, como explica el presidente de la Comunidad de Regantes de la Boladilla, José Galán. "Esto es zona agrícola y aquí no cabe una industria", explica. "Ahora de agrícola no tiene nada y lo que hay es una industria tras otra. Desde la punta de abajo a la de arriba está lleno de montoncitos de piedras" asegura Galán.

En este momento, cuatro parcelas se destinan al almacenamiento de piedra, grava y asfalto; materiales que son molidos para conseguir tierra. Sin embargo, eso no es lo más preocupante. El principal problema es que, en la zona, hay tres pozos de agua potable, pertenecientes a la Confederación Hidrográfica del Sur, que se resevan para épocas de sequía. Se trata del mayor acuífero de agua dulce del municipio. A menos de veinte metros de uno de esos pozos, desde hace dos años, se está procediendo a la extracción de grava a más de diez metros de profundidad, por lo que ya se ha llegado al acuífero, poniendo en peligro la calidad del agua. "No sé cuantos metros autoriza Medio Ambiente que se le puedan extraer a una parcela, pero creo que es un metro o metro y medio no esto que supera los diez", denuncia Galán, quien va más allá: "con esta saca de grava las aguas llegan contaminadas. De hecho, varios vecinos han hecho sondeos y analizaron el agua confirmando que tiene metales pesados".

Y es que, no sólo se saca grava, también se rellena, de manera que los camiones puedan entrar y salir. Una actividad que no siempre se hace con la tierra adecuada, por lo que el agua que ha emergido ya no está, ni mucho menos, limpia. "Cuando rellenan, si en la cubeta del camión hay una lata de aceite también va y, como esa, montones de cosas", apunta el presidente de la Comunidad de Regantes. Por eso, echan de menos más control por parte de la Delegación de Medio Ambiente. "Tanto la extracción como el relleno deberían estar controlados por Medio Ambiente y Medio Ambiente o no está o se ha ido de vacaciones", denuncia.

contaminación

A ello se une la continua actividad de las canteras. Los acopios superan los quince metros de altura, con el consiguiente peligro de descarga hacia el cauce del río. Además, el polvo que se produce está afectando no sólo a los cultivos sino también a la ganadería. "A los vecinos de al lado ni siquiera les corre el aire", denuncia Galán. "Esas parcelas se alquilaron para el acopio de tierra. Se han hecho montañas de hasta ocho metros de altura y no sólo eso, se han dedicado a moler grava y asfalto de carretera por lo que, el día que hace viento, el polvo llega al nacimiento del río. Está todo contaminado" asegura.

Y, por si fuera poco, el continuo trasiego de camiones está provocando importantes daños a las infraestructuras: carreteras, red eléctrica, etc. Los vecinos han dado la voz de alarma. Insisten en que no sólo se está perjudicando a los agricultores sino que se está hipotecando el futuro de las reservas hídricas del municipio.

silencio administrativo

Por su parte, el concejal de Urbanismo del Ayuntamiento, Rafael Duarte, ha reconocido que "estas industrias carecen de licencia para desarrollar esa actividad", entre otras cosas, porque el suelo en el que se ubican no está destinado a tal fin y, además, está protegido. Por ello, ha asegurado que, desde su delegación, ya se han puesto a trabajar. "Se le va a abrir un expediente a dichas empresas" por trabajar sin autorización municipal y se va a tratar de paralizar la actividad.

Duarte se mostró sorprendido dado que, según explicó, "tanto la Confederación Hidrográfica del Sur como la delegación provincial de Medio Ambiente conocían la situación y no han hecho nada para darle una solución".

El edil entiende que no se puede permitir que se dañe de ese modo el medio ambiente y la imagen del municipio.