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Saturday, July 14, 2007

Testaferros de Roca negociaban convenios en Estepona


ABC. Sábado 14 de julio de 2007

Testaferros de Roca negociaban convenios en Estepona

J. M. CAMACHO. MÁLAGA.
El polémico alcalde de Estepona, el socialista Antonio Barrientos, aparece también en el sumario del «caso Malaya» vinculado con el cerebro de la trama de corrupción en Marbella, Juan Antonio Roca. Un informe policial resalta un convenio urbanístico firmado entre algunos de los testaferros de Roca, a través de la sociedad Inversora Inmobiliaria Eridano, y el regidor municipal de esta localidad malagueña, en noviembre de 2005.
Esta empresa es propietaria de dos fincas de 2.741 y 3.000 metros cuadrados de superficie y las parcelas se encontraban, según consta en el informe, en una unidad de ejecución que el PGOU denomina «Bahía de Estepona».
Según la Policía, el ex coordinador de Urbanismo Pedro López fue quien medió en los convenios urbanísticos con el entorno de Roca, pero el alcalde, Antonio Barrientos, «pudo tener conocimiento de las irregularidades» que se cometían en ese departamento.
Las grabaciones realizadas por la Policía demuestran las múltiples llamadas que realizó el ex gerente de Urbanismo al despacho de Roca. Las anotaciones de su secretaria destacan la importancia de las llamadas, algunas calificadas de muy importantes.


Nervios
En los días previos a la resolución del negocio, algunos testaferros de Roca se pusieron nerviosos y exigieron una reunión ante el temor de que el móvil estuviera intervenido por las Fuerzas de Seguridad. José Arteaga fue el encargado de negociar los términos esenciales del contrato y estableció liquidar la hipoteca existente y pagar el resto mediante efecto mercantil librado a tal fin. En el contrato se especifica que las cantidades que se fijan como contraprestación queda fijada a que Eridano adquiera los aprovechamientos urbanísticos y el exceso de edificabilidad correspondiente al Ayuntamiento de Estepona mediante la suscripción del convenio urbanístico.
Según los agentes, las negociaciones entre Óscar Benavente y Julio Blasco Bazo Garrido con el ex gerente de Urbanismo Pedro López estuvieron dirigidas por la entonces asesora del Ayuntamiento de Marbella María Castañón. Este convenio fue llevado a pleno para su aprobación por parte del Consistorio municipal el 16 de febrero de 2006.
Una vez aprobado, Benavente reconoce haber recibido una serie de pagos, al tiempo que subraya su deseo de recibir dinero en B y no en talones bancarios. También está acreditado que su socio, Julio Blasco Bazo, recibió ingresos provenientes de este negocio.
En el informe policial figuran las llamadas del coordinador de Urbanismo de Estepona y contactos con el cerebro de la «Malaya», así como con el testaferro Óscar Benavente. También se destaca la mediación y asesoramiento de Pedro López, que ejerce la máxima responsabilidad como coordinador de Urbanismo del Ayuntamiento de Estepona, al tiempo que se subraya que sólo el alcalde del municipio, Antonio Barrientos, está por encima de él en esta materia.
Los investigadores indican que Benavente se jacta de que el ex gerente de Urbanismo es «un hombre suyo» y presume de que está relacionado con una de las personas que aparecen en la operación.