Desmantelan una trama delictiva que operaba desde la prisión provincial
Diario Málaga Hoy. Viernes 8 de febrero de 2008
Desmantelan una trama delictiva que operaba desde la prisión provincial
Supuestamente se organizaban envíos de drogas y atracos a joyeros · La Guardia Civil ha realizado ya casi una decena de detenciones · Imputado un abogado y arrestado un empresario
Una decena de detenidos aproximadamente es el balance de una crucial operación de la Guardia Civil que ha puesto al descubierto un complejo entramado delictivo cuyas raíces se podrían encontrar en la misma prisión provincial de Alhaurín de la Torre. Los delincuentes podrían haber estado operando desde dentro de la cárcel. Se trata de la misma operación por la que días atrás fueron arrestados dos funcionarios de la misma, según confirmaron ayer fuentes penitenciarias. En la intervención ha sido arrestado un empresario de Torremolinos, propietario de varias tiendas en la localidad, se ha imputado a un abogado de Estepona y han sido capturados una serie de delincuentes que presuntamente recibían órdenes de presos encarcelados para traficar con drogas y perpetrar atracos.
Según informaron fuentes de la cárcel, la intervención del Instituto Armado está conectada con la captura de los dos trabajadores de la prisión, a los que se acusa de introducir sustancias estupefacientes y teléfonos móviles.
El descubrimiento de la trama ha sido consecuencia de una investigación abierta contra un grupo delictivo que operaba en la Costa del Sol. Las escuchas telefónicas confirmaron la relación de algunos de los elementos de la banda con los dos funcionarios, lo que precipitó su arresto. Durante los pinchazos se intervino una conversación que demostraba una clara conexión.
El paso posterior fue un registro realizado por los agentes en la misma prisión el 30 de enero, donde, entre otras cosas, se localizaron importantes sumas de dinero y tarjetas telefónicas y bancarias. Algunas de ellas estaban estrechamente relacionadas con los empleados arrestados, mientras que otros registros se llevaron a cabo en celdas de reclusos, según ha podido saber este diario.
Este operativo fue desarrollado por decenas de guardias que inspeccionaron por sorpresa diversas dependencias de la penitenciaría causando un gran revuelo entre trabajadores y presos, ya que se trata de una intervención con escasos precedentes.
En los días posteriores se han practicado diversas detenciones, hasta llegar a cerca de la decena de delincuentes supuestamente vinculados al tráfico de drogas y robos con violencia, al parecer atracos.
La hipótesis con la que trabaja la Guardia Civil es que las tres patas puestas al descubierto -delincuentes, funcionarios y encarcelados- estaban estrechamente conectadas y que algunos reos dirigían operaciones delictivas desde el interior de la prisión. Para ello se podían valer de los teléfonos móviles que les introducían y con los que contactaban con otros delincuentes que se encontraban en libertad para perpetrar diversos delitos de manera conjunta.
Sobre los presos que dirigirían los hilos de la red desde sus celdas se especulaba con la participación de un delincuente de origen magrebí, aunque también se apuntaba la posibilidad de la vinculación de algún grupo de ciudadanos italianos.
El origen de la operación pudo haber arrancado a raíz de una serie de atracos perpetrados contra representantes de joyerías de la Costa del Sol y por los que podrían haber conseguido importantes sumas de dinero, aunque no ha trascendido el número de atracos perpetrados contra los joyeros o si la banda actuaba contra otros objetivos.
Los delincuentes podrían haberse hecho con las matrículas de los coches de los joyeros para así seguirlos y perpetrar los atracos. Algún miembro de la banda se encargaba de facilitar las direcciones de los representantes a través de sus matrículas para así poder tenerlos más controlados.
Los tentáculos de la trama llegan a más ámbitos profesionales ya que, según señalaron a Málaga hoy las citadas fuentes, en la operación también ha sido detenido un empresario con diferentes intereses comerciales en Torremolinos. Además, un abogado que trabajaba en Estepona ha sido imputado en el caso, aunque quedó en libertad con cargos.
Las fuentes señalaron que la intervención se da por cerrada, aunque no se descarta que de esta investigación surjan nuevas pistas y ramificaciones.
Desmantelan una trama delictiva que operaba desde la prisión provincial
Supuestamente se organizaban envíos de drogas y atracos a joyeros · La Guardia Civil ha realizado ya casi una decena de detenciones · Imputado un abogado y arrestado un empresario
Una decena de detenidos aproximadamente es el balance de una crucial operación de la Guardia Civil que ha puesto al descubierto un complejo entramado delictivo cuyas raíces se podrían encontrar en la misma prisión provincial de Alhaurín de la Torre. Los delincuentes podrían haber estado operando desde dentro de la cárcel. Se trata de la misma operación por la que días atrás fueron arrestados dos funcionarios de la misma, según confirmaron ayer fuentes penitenciarias. En la intervención ha sido arrestado un empresario de Torremolinos, propietario de varias tiendas en la localidad, se ha imputado a un abogado de Estepona y han sido capturados una serie de delincuentes que presuntamente recibían órdenes de presos encarcelados para traficar con drogas y perpetrar atracos.
Según informaron fuentes de la cárcel, la intervención del Instituto Armado está conectada con la captura de los dos trabajadores de la prisión, a los que se acusa de introducir sustancias estupefacientes y teléfonos móviles.
El descubrimiento de la trama ha sido consecuencia de una investigación abierta contra un grupo delictivo que operaba en la Costa del Sol. Las escuchas telefónicas confirmaron la relación de algunos de los elementos de la banda con los dos funcionarios, lo que precipitó su arresto. Durante los pinchazos se intervino una conversación que demostraba una clara conexión.
El paso posterior fue un registro realizado por los agentes en la misma prisión el 30 de enero, donde, entre otras cosas, se localizaron importantes sumas de dinero y tarjetas telefónicas y bancarias. Algunas de ellas estaban estrechamente relacionadas con los empleados arrestados, mientras que otros registros se llevaron a cabo en celdas de reclusos, según ha podido saber este diario.
Este operativo fue desarrollado por decenas de guardias que inspeccionaron por sorpresa diversas dependencias de la penitenciaría causando un gran revuelo entre trabajadores y presos, ya que se trata de una intervención con escasos precedentes.
En los días posteriores se han practicado diversas detenciones, hasta llegar a cerca de la decena de delincuentes supuestamente vinculados al tráfico de drogas y robos con violencia, al parecer atracos.
La hipótesis con la que trabaja la Guardia Civil es que las tres patas puestas al descubierto -delincuentes, funcionarios y encarcelados- estaban estrechamente conectadas y que algunos reos dirigían operaciones delictivas desde el interior de la prisión. Para ello se podían valer de los teléfonos móviles que les introducían y con los que contactaban con otros delincuentes que se encontraban en libertad para perpetrar diversos delitos de manera conjunta.
Sobre los presos que dirigirían los hilos de la red desde sus celdas se especulaba con la participación de un delincuente de origen magrebí, aunque también se apuntaba la posibilidad de la vinculación de algún grupo de ciudadanos italianos.
El origen de la operación pudo haber arrancado a raíz de una serie de atracos perpetrados contra representantes de joyerías de la Costa del Sol y por los que podrían haber conseguido importantes sumas de dinero, aunque no ha trascendido el número de atracos perpetrados contra los joyeros o si la banda actuaba contra otros objetivos.
Los delincuentes podrían haberse hecho con las matrículas de los coches de los joyeros para así seguirlos y perpetrar los atracos. Algún miembro de la banda se encargaba de facilitar las direcciones de los representantes a través de sus matrículas para así poder tenerlos más controlados.
Los tentáculos de la trama llegan a más ámbitos profesionales ya que, según señalaron a Málaga hoy las citadas fuentes, en la operación también ha sido detenido un empresario con diferentes intereses comerciales en Torremolinos. Además, un abogado que trabajaba en Estepona ha sido imputado en el caso, aunque quedó en libertad con cargos.
Las fuentes señalaron que la intervención se da por cerrada, aunque no se descarta que de esta investigación surjan nuevas pistas y ramificaciones.
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