Monumental bronca en la cafetería del Palacio a cuenta de un mensaje de móvil a Francisco Zamorano.

Diario Sol. Jueves 13 de marzo de 2008

Monumental bronca en la cafetería del Palacio a cuenta de un mensaje de móvil a Francisco Zamorano.

Se aprueba una operación de crédito por 6,7 millones para gasto corriente y se solicitará la revisión del catastro

Dos plenos y una monumental bronca. El Ayuntamiento de Estepona ha celebrado dos sesiones plenarias extraordinarias y urgentes para aprobar, por un lado, una operación de crédito por 6,7 millones de euros para pagar compromisos municipales, admitir las alegaciones presentadas por la empresa Acciona, que había quedado fuera del concurso para la adjudicación del servicio de recogida de resíduos sólidos y, en un segundo pleno, después de una farragosa discusión política, solicitar una revisión a la baja de los valores catastrales del municipio.
Entre uno y otro pleno se producía la secuencia de uno de los enfrentamientos más ásperos que se recuerdan. Al parecer, el portavoz municipal socialista, Francisco Zamorano, culpaba a José Ignacio Crespo, portavoz del PES, de un mensaje que había recibido en su teléfono móvil. En el receso que se concedió entre las dos sesiones plenarias, en la zona de la cafetería, el portavoz del PES se dirigió, con un tono verbal muy airado, al portavoz socialista, diciéndole que no iba a estar dispuesto a seguir aguantando ese tipo de insinuaciones y que estaba cansado de insultos y descalificaciones. El tono empleado por el portavoz del PES incluso llegó a alertar al jefe de la Policía Local, que se encontraba en el lugar, así como a otros agentes que mediaron para que la situación no fuese a mayores.
Ante las palabras de Crespo, el jefe de la Policía le pidió calma y le sugirió que denunciase el caso si así lo estimaba, algo que Crespo, de manera verbal, dijo que constase en ese mismo momento y, al parecer, ha llevado esa denuncia también ante el Juzgado de Guardia.
Francisco Zamorano, por su parte, ha declinado hacer ningún tipo de valoración o comentario sobre lo sucedido señalando que es un asunto estríctamente personal y que no quiere darle mayor importancia.