Imbecilidad

Blog contrampania. Martes 22 de mayo de 2007

Imbecilidad

Hace unos días me despedía de un niño pequeño asegurándole que volvería en un momento. Le mentí para no dejarle llorando. No está bien, pero supuse que pronto se distraería con algún juguete y se olvidaría de mí. Pues bien. No lo hizo, y al cabo de un par de horas seguía esperando a que volviera, hecho que me hizo sentir bastante mal cuando supe que no paraba de preguntar cuando regresaría.No cuento esto como una mera anécdota personal, si no que, por no creer que los políticos se atreven a llamarnos IMBÉCILES en nuestra cara con el más absoluto descaro, se me ha ocurrido que tal vez, quizás, pueda ser que en realidad lo que les pase es que vean y traten a los mayores de edad que van a votarles como si fueran niños de dos años. ¿Qué por qué lo digo? Basta con darse un paseíto por El Calvario. Hace varias semanas Rafael Montesinos se hacía la foto en la parcela para anunciar a bombo y platillo que el parking que debía haber empezado a construir en noviembre de 2006 iba a empezar a hacerse un mes antes de las elecciones, para lo cual, había que iniciar el vallado de la zona. Ni corto ni perezoso, el señor Montesinos procede a instalar un mallazo para delimitar el perímetro, así como dos banderolas del adjudicatario de la obra. Tres semanas después todo sigue igual. Los coches siguen aparcando en el barro, allí no hay ni una grúa, pero el líder andalucista duerme feliz pensando que ha puesto en marcha el Parking del Calvario, o más bien, pensando que todos los vecinos se han creído que él va a construir el aparcamiento.Estamos a unos días de que acabe el gobierno tripartito y el poniente es el único que mueve la tierra en la parcela en cuestión. Quizás ahora... A dos días de las elecciones, resulta que aparece, milagrosamente, una máquina a remover aquello, en un intento de convencernos de que se empiezan las obras.A todo esto yo vuelvo a acordarme del mocoso al que dejé esperándome. Si él no se olvidó de la promesa que le hice, ¿qué lleva a los políticos a pensar que nos pueden distraer con maniobras tan absurdas?El niño lloró porque le mentí. Espero que los votantes sepan llorar también el día 27.